Los últimos datos demoscópicos publicados por Sondaxe para La Voz de Galicia confirman una tendencia clara en el panorama político gallego: el BNG es la única fuerza en ascenso tanto en intención directa de voto como en voto ponderado. Además, su progresión en las elecciones generales es notable, asegurándose un escaño más en el Congreso y reforzando su presencia en Madrid.
A nivel autonómico, la encuesta refleja estabilidad en los bloques, con un PPdeG que mantendría su mayoría absoluta y un PSdeG sin capacidad de recuperar espacio. Pero a pesar de esta aparente inmovilidad, el Bloque sigue escalando en apoyo, especialmente entre el electorado más joven y urbano. El trasvase de votos también evidencia esta tendencia: un 11% de los votantes socialistas en las últimas autonómicas optaría ahora por el BNG, mientras que el flujo inverso apenas llega al 3%. Este fenómeno confirma que el nacionalismo gallego está consiguiendo atraer al sector progresista desencantado con el papel del PSdeG.
El BNG sigue expandiendo su base electoral y reforzando su posición como única alternativa viable.
El análisis de los liderazgos también deja datos reveladores. Ana Pontón supera a Rueda en todos los indicadores de valoración, excepto en la capacidad de gobierno, donde el factor de incumbencia sigue jugando a favor del presidente de la Xunta. No obstante, entre la población más joven y en las ciudades, la líder del BNG destaca como la figura política mejor valorada, un dato especialmente relevante de cara al futuro político del país.
La fuerza ascendente del BNG también se hace evidente en el ámbito estatal. La encuesta muestra un incremento significativo de la intención de voto a la formación nacionalista en las elecciones generales, lo que le permitiría asegurarse un escaño más en el Congreso. Este crecimiento responde a la consolidación del Bloque un interlocutor relevante en Madrid en el ya asentado modelo de gobiernos en minoría.
Estos resultados reflejan una dinámica de cambio a medio plazo. Si bien el PPdeG mantiene el control institucional gracias a su arraigo en el medio rural y al apoyo de las franjas de edad más avanzada, el BNG sigue expandiendo su base electoral y reforzando su posición como única alternativa viable. Con el paso del tiempo, y a medida que estas tendencias se consoliden, la política gallega podría encaminarse hacia un escenario de mayor equilibrio entre bloques, en el que la hegemonía del PP no esté tan asegurada.
Los datos de Sondaxe, lejos de confirmar un panorama cerrado, muestran que el nacionalismo gallego sigue su tendencia ascendente y que Ana Pontón se consolida como la líder con mayor potencial de futuro.